Entornos de trabajo estimulantes, que inspiran, favorecen la creatividad y los vínculos de comunicación. Nuevos formatos operativos que se confunden deliberadamente con los domésticos. Soluciones tecnológicas que se convierten en habituales en un ecosistema que gira alrededor del mundo digital.
Workplace3.0
Distritooficina ha estado en Workplace3.0, la muestra milanesa dedicada a la oficina del siglo XXI, que coincide con el Salone del Mobile, para ver cómo se materializan las nuevas tendencias con propuestas concretas.
Mucho se ha hablado de la influencia que el ambiente del entorno de trabajo tiene en las personas y la necesidad de replantearlo poniendo a éstas en el centro del proceso de diseño.
Vivimos en una época de profunda evolución no sólo de los formatos operativos, sino también la propia idea de la oficina. Las nuevas profesiones afines, directa o indirectamente, al ecosistema digital están generando una dinámica de modelos de organización cada vez más flexibles.
En este marco surgen casos inusuales que convierten a la oficina en uno de los mejores lugares para la experimentación de diseño.
Esta nueva visión se traduce en la creación de un ambiente estimulante para los que trabajan. Entornos que les permitan sentirse inspirados y establecer vínculos sociales y relaciones de trabajo gratificantes y creativas. Otro efecto de la liquidez difusa del nuevo lifestyle es la coincidencia, cada vez más frecuente, entre los espacios para habitar y los de trabajo.
Por ello, muchos diseñadores están haciendo muebles de oficina con un énfasis en fronteras cada vez más borrosas entre estas dos áreas y que responden a la solicitud de objetos versátiles, duraderos y funcionales para el trabajo, pero al mismo tiempo, lo suficientemente atractivos para ser utilizados como soluciones domésticas decorativas.