La gestión de los empleados es uno de los desafíos más difíciles al que se enfrentan los empresarios y la discusión sobre la personalidad de la generación millennial ocupa buena parte de sus esfuerzos respecto a su estrategia de crecimiento. Esta generación hiperconectada, amante de la tecnología y emprendedora representa ya más del 30 por ciento de los trabajadores y se calcula que representará la mitad en 2020. En base a los estudios más recientes sobre esta generación presentamos 5 cosas que los millennials odian sobre sus espacios de trabajo. Lo que hay que evitar parar atraer el talento millennial.

 

5 cosas que los millennials odian sobre su lugar de trabajo

  1. El modelo de open space severo

La oficina open space panorámica no les convence ya que tienen la impresión de que se les vigila constantemente. No sólo erosiona la confianza, sino que también perturba el ruido y dificulta la productividad. Además, si la alta dirección trabaja en oficinas privadas mientras que ellos lo hacen en un espacio abierto, se sienten molestos con la gerencia por su parcialidad. Esta generación prefiere un entorno más abierto que los tradicionales, pero no un open space absoluto e integral, sino una oficina que incluya puestos flexibles (hot desk), espacios de colaboración, cabinas de concentración y tecnologías innovadoras.

  1. Tiempos de trabajo estrictos

A los millennials les gusta trabajar a su propio ritmo y en su propio espacio. Odian categóricamente los empleos de ocho a cinco, creen que la asistencia a la oficina de forma regular es innecesaria y prefieren trabajar de forma remota. Les gusta mantener horarios flexibles para alcanzar un equilibrio perfecto entre el trabajo y la vida, sin que ello disminuya en el compromiso con la empresa. Los tiempos de trabajo estrictos generan rechazo en esta generación.

  1. Falta de transparencia en la toma de decisiones

Esta generación valora positivamente estar involucrada en el flujo de comunicación y estrategia de su empresa. Desean una cultura de trabajo colaborativa en lugar de competitiva. Cuando las compañías toman una decisión, a los millennials les gusta conocer el razonamiento detrás de ella, para entenderlo, adoptarlo y trabajar con un objetivo común. Es imprescindible crear un entorno de trabajo transparente, realizar reuniones para actualizar a los empleados, solicitar sus opiniones y comentarios y tomar decisiones de forma colectiva.

  1. Ausencia de formación

La retroalimentación sobre su trabajo es una necesidad para la generación millennial. Quiere información frecuente sobre lo que está haciendo bien y lo que está haciendo mal junto con soluciones para mejorar. Buscan comentarios constantes de sus líderes y, por eso, las compañías que organizan sesiones de capacitación para sus empleados ganan puntos con esta generación. Ya se trate de que un experto de la industria hable sobre un tema en particular o el nombramiento de líderes para realizar sesiones semanales, los millennials ven las capacitaciones como su oportunidad de aprender de los mejores. Las empresas que no realizan sesiones de formación evitan que sus empleados crezcan, se desarrollen y aporten talento.

  1. Desperdicio de tiempo

Reuniones que se alargan hasta la extenuación, trabajo hasta altas horas de la madrugada por falta de organización… los millennials valoran más su tiempo que el dinero y, por lo tanto, odian que las empresas no lo respeten. Además, bombardear a los millennials con correos electrónicos y llamadas telefónicas durante el fin de semana no es la mejor idea, porque buscan un equilibrio correcto entre el trabajo y vida.

Texto: Marcel Benedito

Fuentes: Iofficecorp, Yourstory, Munira Rangwala.