biofilia

El biólogo y entomólogo norteamericano Edward Wilson, una autoridad mundial sobre el estudio de las hormigas, fue el primero en formular la hipótesis de que el contacto con la naturaleza es esencial para el desarrollo psicológico de las personas. Su teoría dice que durante los millones de años que nuestra especie se relacionó con su entorno, más o menos salvaje, creó una especie de dependencia, una necesidad emocional irresistible de estar en contacto directo con el resto de seres vivos. A esta necesidad congénita la llamó Biofilia.

Información: Human Spaces, Interface.

En 2004, la empresa líder en biotecnología, Genzyme Corporation, encarga al estudio de arquitectura Behnisch Architekten de Los Angeles, una nueva sede corporativa que incluya características como luz natural, una fachada de vidrio transparente, un atrio central con placas brillantes que reflejen la luz del sol, jardines interiores, fuentes de agua y ventanas. Este edificio fue uno de los primeros en alcanzar el estatus Platino LEED (Liderazgo en Energía y Diseño Ambiental). Es un excelente ejemplo de lo que se puede lograr mediante la aplicación de estrategias sostenibles en el lugar de trabajo.

La satisfacción del deseo vital de permanecer en contacto con la naturaleza, dice Wilson, tiene la misma importancia que el hecho de entablar relaciones con otras personas. En 1995, el científico Stephen Kellert aporta la definitiva aproximación al término biofilia definiéndola como: “La innata afinidad humana por la naturaleza” y sienta las bases de lo que será la aplicación de esta sensibilidad al diseño y la arquitectura.

La incorporación del concepto de biofilia implica acercar la naturaleza al ambiente edificado, evocando la doble esencia del ser humano, social y natural. Supone un enfoque del diseño del entorno que recupere ese vínculo, ayude a entender mejor las necesidades de la naturaleza y cree un modelo ecológico de convivencia.

El desafío del diseño biofílico es abordar las deficiencias de la arquitectura contemporánea de los edificios, del paisaje y del interior, iniciando un nuevo marco para la experiencia beneficiosa de la naturaleza en el entorno construido (Kellert y Finnegan, 2011). El diseño biofílico consiste en crear un hábitat como si fuera un organismo biológico sano en los edificios y construcciones, destinado a favorecer la salud, la aptitud y el bienestar de las personas que acoge.

biofilia

La aplicación exitosa del diseño biofílico requiere adherirse a una serie de objetivos o principios básicos.

Estos principios representan condiciones fundamentales para la práctica efectiva del diseño biofílico.

  1. El diseño biofílico requiere un compromiso repetido y sostenido con la naturaleza.
  2. Se centra en las adaptaciones humanas al mundo natural que durante periodos evolutivos han mejorado la salud y las capacidades de las personas.
  3. Este enfoque hace hincapié en un apego emocional a determinados lugares.
  4. Promueve interacciones positivas entre las personas y la naturaleza que expanden nuestra comprensión de la comunidad para incluir tanto a los seres humanos como a la naturaleza.
  5. El diseño biofílico fomenta soluciones de diseño ecológicamente conectadas, de refuerzo mutuo y de diseño integrado.

 

Biofilia

El interés por la biofilia ha crecido sustancialmente durante la última década, debido en gran parte a la rápida urbanización del mundo moderno, que ha dado lugar a ciudades que se caracterizan por un predominio de las estructuras artificiales. Las cifras mundiales muestran este increíble cambio en las poblaciones que se han desplazado a las zonas urbanas durante los últimos 60 años.

genzyme center

Las consecuencias de una disminución del contacto físico con la naturaleza son poco conocidas, especialmente en los países que se están urbanizando más rápido. En el entorno construido de hoy en día, las personas están cada vez más aisladas de la experiencia beneficiosa de los sistemas y procesos naturales. Imitando estos entornos naturales en el lugar de trabajo, se crean espacios de trabajo imbuidos de experiencias emocionales positivas.

 

Los efectos restauradores de la naturaleza

Una investigación realizada entre trabajadores para saber qué elementos valoran más en su entorno laboral, muestra que la luz natural es el elemento más buscado dentro del lugar de trabajo. Del mismo modo, las plantas de interior y los colores vivos se clasifican entre los cinco primeros.

 

biofilia

En el trabajo, cuando enfocamos nuestra atención a una tarea exigente, los factores en nuestro ambiente que nos interrumpen pueden conducir a la fatiga mental. Sin embargo, los espacios de trabajo que incorporan la naturaleza proporcionan ajustes más tranquilos que permiten una atención más fácil y puede restaurar nuestra capacidad mental. Esto se conoce como Teoría de la Restauración de la Atención, que postula que ver y experimentar la naturaleza involucra una parte diferente del cerebro de la que se usa en el enfoque de alta atención.

Oficina de Thomas Wellnes con jardín vertical proyectado por www.greenarea.es

 

¿Cuáles son los elementos naturales ligados positivamente al bienestar en el trabajo?

Vistas de la naturaleza: las vistas en las ventanas de las zonas verdes y el agua estaban vinculadas con niveles más bajos de estrés. Colores acentuados: el bienestar de los empleados se ve afectado positivamente por las oficinas que incorporan colores parecidos a la naturaleza como verde, azul y marrón. También se encontró que el uso de colores grises dentro del espacio de trabajo tuvo un impacto negativo significativo en los niveles de estrés de los empleados.

 

FUENTES  HUMAN SPACES, INTERFACE

TEXTO  MARCO BRIONI