La carga inalámbrica ofrece ventajas claras para los usuarios: basta con dejar reposar el smartphone sobre una superficie adecuada para olvidar los molestos cables. Esta tecnología de carga por inducción, cuya opción más conocida es el estándar Qi, permite mejorar una superficie de trabajo o mesa de reuniones con el aliciente del cargador sin cables. 

 

Qi

El Consorcio Wireless Power, que desarrolló este estándar, eligió la marca Qi (pronunciada «chee») para referirse al concepto de flujo de energía en la medicina tradicional china. La recarga por inducción no usa cables, pero exige tener el smartphone sobre una base para que se transfiera la carga a través de ondas magnéticas. Algunas bases permiten separar el teléfono o la tablet ligeramente para usarlo, no a mucha distancia, sin que deje de cargar.

En el mundo de los móviles, la carga inalámbrica se ha convertido en algo común para muchos fabricantes. La mayoría usan el estándar Qi, pero hay otros que usan Powermant, PMA o A4WP. No existe un sólo estándar para cargar dispositivos de forma inalámbrica ya que se trata de una tecnología muy reciente.

Algunos fabricantes de mobiliario de oficina, como es el caso de Sedus, presentaron el equipo de carga Qi en la mayoría de los modelos de mesas que exponían en la última edición de Orgatec. Estas estaciones de carga funcionan incluso bajo el chapado del tablero de la mesas, lo que permite integrarlas elegantemente en el equipamiento de conferencia más representativo. La estación de carga se activa únicamente cuando se coloca encima un aparato compatible que necesita cargarse. Los aparatos pasan al modo de espera tan pronto como tienen la batería llena.

 

Selja Ikea Tecnologia Qi

También la multinacional Ikea ha incorporado estaciones Qi a algunos de sus modelos de mesitas de noche y lámparas de mesa, lo que demuestra el interés popular por esta tecnología.

 

CÓMO FUNCIONA EL CARGADOR INALÁMBRICO

Los cargadores con estándar Qi usan dos opciones técnicas. La primera funciona a base de inducción magnética (como las placas de cocina) que necesita que el dispositivo esté siempre en contacto con el cargador. Usa dos bobinas, una que transmite y otra que recibe. Ambas generan un campo magnético que transfiere la carga para que llegue a la receptora. Para que este campo se mantenga activo ambas bobinas deben estar en contacto una con la otra.

Los que usan recarga por resonancia permiten que el dispositivo se separe del cargador pero que se mantenga cerca para que siga cargando. Una transmisión más libre que logra que el dispositivo esté a una distancia que puede ser de 5 a 40 mm , lo que aún es muy poco, pero es mejor que nada.

La carga por inducción se puede considerar  una opción “verde” porque reduce la demanda de cables, hace que los gadgets sean más duraderos y reduce la renovación frecuente de baterías. No habrá que usar más cables molestos, aunque la base que proporciona la electricidad wireless no puede prescindir de ellos. La durabilidad de las baterías será mayor porque no se conectan y desconectan a su fuente de energía, lo que causa daños y desgaste.

TEXTO: MARCO BRIONI